El laberinto de sinsabores que los hilos del destino tejieron para tí recorriste y ahora te encuentras frente al mar. Nunca lo habías visto antes más que en las ilusiones proyectadas por la melancolía de otros, y aun así aquellos no eran frío y gris como este.
La desesperación de recibir este paraje muerto como un premio merecido mas no deseado te llevó las manos a la cabeza y te hizo incarte de rodillas en la arena microscopica, inofensiva en minima cantidad y mortal cuando infinita.
No comments:
Post a Comment